Japón y EE.UU. realizan ejercicios navales entre amenazas de Corea del Norte

Corea del Sur, Japón y Estados Unidos llevaron a cabo unas maniobras navales conjuntas planificadas desde hace tiempo, en las que participó un portaaviones estadounidense, para garantizar su preparación frente a las amenazas nucleares y de misiles de Corea del Norte, informó el viernes la Marina de Seúl.

Corea del Norte ha acelerado el desarrollo de armamento, probando misiles hipersónicos de combustible sólido la semana pasada, y el líder Kim Jong Un dijo el miércoles que ahora era el momento de estar más preparados para la guerra que nunca, citando una situación geopolítica inestable.

«Las fuerzas participantes llevaron a cabo ejercicios de guerra antisubmarina para mejorar su respuesta a las amenazas submarinas norcoreanas, incluidos los submarinos y los misiles balísticos lanzados desde submarinos», informó la Armada surcoreana en un comunicado.

Los ejercicios de dos días celebrados en aguas internacionales entre Corea del Sur y Japón desde el jueves reunieron al portaaviones Theodore Roosevelt y a los destructores Howard, Russell y Daniel Inouye, con buques de guerra de los vecinos asiáticos.

El adiestramiento, destinado a reforzar su capacidad combinada para responder a las amenazas de Corea del Norte, sigue un plan plurianual de ejercicios conjuntos establecido tras la cumbre tripartita del año pasado, según informó la armada surcoreana.

Las tres armadas también realizaron ejercicios de interceptación marítima para bloquear el transporte ilegal de armas de destrucción masiva por parte de Corea del Norte, y entrenamientos de búsqueda y rescate para ayudar a los buques en apuros.

En Washington, funcionarios de defensa surcoreanos y estadounidenses mantuvieron el jueves conversaciones anuales sobre defensa, reafirmando los planes de realizar ejercicios de simulación del uso de un arma nuclear por parte de Corea del Norte en los próximos simulacros de verano, añadió el Ministerio de Defensa de Seúl.

En la cumbre de Camp David del pasado mes de agosto, los líderes de los tres países acordaron realizar ejercicios anuales , compartir información en tiempo real sobre los lanzamientos de misiles norcoreanos y poner en marcha una línea directa para las comunicaciones de crisis.